El aguila y la Luna

El aguila y la Luna

A capela I



A capela I

Dame un beso
y deja de lado,
a los querubines de soledad,
afuera no importa como esté el día,
tú eres eternamente bella,
pero nos duele el corazón,
y ya agotamos a la razón,
estamos locos!
porque sentimos amor,
las ajenas quedan,
las personas quedan disminuidas a menos,
porque no importa,
nosotros sabemos querernos,
y la historia sigue,
las letras cobran vida,
y viven, 
yo a veces estoy muy solo,
pues a veces te tardas,
cuando las noches pierden su decoro…

y me haces falta.

 De Sol Elk

A capela II



A capela II

Dejé guardado un pedazo del cielo
en el lugar equivocado,
esa noche colgué mi armadura
en un perchero de hielo.

El asfalto tiene venas abiertas
y en sus heridas brotan los pastos,
donde juegan las orugas
y con voracidad devoran la amargura
de las gotas de lluvia,
que mueren con el sol.

Dejé mi cuaderno olvidado en el tren,
corrí subiendo las escaleras
y cada vez más lejano se hacia el andén,
pero llegué,
solo para ver como se alejaba,
la espalda del último vagón.

 De Sol Elk

A capela III



A capela III


La marea del existir
tiene enormes olas
con nombres de días,
y sus playas están llenas
con las huellas, de los pies de las horas.

Los arcos iris son en blanco y negro
cuando no puedes soñar,
y si tu boca esta seca
es porque le falta un beso.

Aunque se cansen tus brazos
no dejes de recoger los “limones”,
no hace falta que lo digas,
yo sé que sabrás como endulzarlos;
la tarde se sonroja en un ocaso
hasta que se duerme,
la luna estuvo sobre el agua todo el día
y en ese momento yo te amé,

porque vi cómo sonreías.

 De Sol Elk

A capela IV



A capela IV

Hoy es un nuevo día,
las paredes por fin
escuchan canciones
y el corazón está tranquilo.

La esperanza tiene facciones de realidad
y el mañana gris
será sólo un recuerdo,
porque el amor vuela libre
otra vez;

pero esta vez, es más sabio
y no permitirá mas heridas,
esta vez sólo quiere ser él,
esta vez…

sólo se dedica a sentir.

De Sol Elk

A capela V



A capela V

Tan sólo su presencia opacó al sol,
tan sólo su sexo,
opacó a todos los pecados.
Ella volvió a mi alma un mundano,
tan sólo soy una hoja en blanco
y ella mi fatídica imprenta,
porque entre sus piernas…

está la fuente de todos mis deseos.

 De Sol Elk